Justo en el momento en que estiró los brazos recordó
que no había comprado desodorante. ¡Qué torpeza la mía!, se reprochó Roberto.
¡Siempre el mismo distraído! Imaginó que en un rato, después de ducharse no
tendría desodorante que ponerse. Se sintió incómodo con eso. De pronto, reparó
en que sus manos no habían apretado las de su compañero. Por eso, Nicolás se
alejaba vertiginosamente con los brazos extendidos, las palmas de las manos abiertas
y con un gesto de horror en el rostro. Nuevamente, Roberto se lamentó por ser tan
distraído mientras lo miraba alejarse, cayendo a la arena del circo. Ahora,
además del desodorante tendría que comprar flores, pensó todavía columpiándose
en el trapecio.
LIBRERRANTES
miércoles, 1 de junio de 2016
miércoles, 13 de abril de 2016
Cinco esquinas, el nuevo libro de Mario Vargas Llosa
La nueva novela de
Vargas Llosa expone el uso de la prensa amarilla como arma para desacreditar a
los enemigos políticos del régimen de Alberto Fujimori, quien gobernó Perú
durante diez años. La historia se centra en el último período de la dictadura de
Fujimori en la cual, además de los desmanes propios del gobierno de facto, eran
comunes los secuestros y atentados de los grupos armados Sendero Luminoso y el
Movimiento Revolucionario Túpac Amaru. La novela fluye con naturalidad entre
las disímiles situaciones de los personajes que representan los distintos
estamentos sociales del Perú. Desde el poderoso empresario del sector minero
hasta la pobretona vida de un ex-recitador que vio arruinada su carrera como
actor cómico por una serie de artículos periodísticos descalificadores.
La raíz del conflicto es
una inesperada visita al despacho del ingeniero Enrique Cárdenas, dueño de
una de las mayores empresas de explotación minera.
“- Me presento –dijo por
fin el personajillo-. Rolando Garro, periodista de toda la vida. Dirijo el
semanario Destapes.” Una revista con
un “relativo éxito de ventas, que casi no tenía publicidad, de modo que Garro
completaba sus ingresos personales extorsionando a vedettes y productores con
amenazas de denunciar sus pecadillos secretos, y a veces, recibiendo dinero de
gentes que querían hacer daños a otras personas desprestigiándolas y
ridiculizándolas.” Aunque el perfil de Destapes
es la chismografía de la farándula y el espectáculo, su director no desaprovecha las oportunidades de generar ingresos en otros rubros. Por eso le llevó al
ingeniero unas comprometedoras fotos de una lujuriosa fiesta que tuvo lugar dos
años antes en Chosica, una apartada localidad de las afueras de Lima. Un
acontecimiento que, después de un frustrado intento de chantaje, desata una
agitación mediática cuyas consecuencias son imprevisibles. Vargas Llosa
dosifica muy bien los conflictos y secretos que conviven en el desarrollo de la
historia. Hace una descripción acertada de las angustias que viven los personajes
afectados por una prensa que suprime su capacidad de empatía en la falsa
creencia de que el fin justifica los medios. Sin embargo, la historia gira y nos muestra que el periodismo ejercido con ética y ecuanimidad es
una herramienta de control y garantía cuando se viven momentos de
avasallamiento social. Aunque sobre final del libro se desdibujan un poco los
perfiles emocionales de los involucrados en relación con las experiencias
vividas hasta ese momento, es una novela sumamente recomendable por la
elegancia de su prosa y porque la narración nos atrapa desde la primera
página.
Título: Cinco esquinas
Autor: Mario Vargas Llosa
Editorial: Alfaguara
lunes, 13 de julio de 2015
La ignorancia
Llegará un día en que ya
no habrá poesía,
Cuando estemos cerca de
la cima de nuestra evolución
Y seamos dioses y lo
sepamos todo
Y no será necesario
nombrar nada, ni decir algo
No habrá bibliotecas, ni
libros, ni cartas, ni garabatos en un papel
Ya no existirá el Arte y
ni las noticias del mundo
Estaremos en silencio bajo
el sutil sonido del universo expandiéndose
Sabiéndolo todo, todo el
tiempo, en la inmanencia del conocimiento
Entonces, extrañaremos
la ignorancia, el descubrimiento por hacer,
La historia por
imaginar, la incertidumbre de vivir,
la sorpresa tras el
párpado del día
viernes, 26 de diciembre de 2014
Tránsitos
Emociones cansadas de tanto circular
dejan surcos en la vida cotidiana
zonas inundables a mi alrededor
agujeros negros por donde caemos a dimensiones
raras
pero posibles
padecemos mutaciones, desfiguraciones, bastardeos
apóstrofes cruzados
Entramos y salimos de recónditos universos
alternativos
que nos atrapan furtivamente
cuando las emociones no respetan las normas de
tránsito
Marcelo, diciembre 2014
La palabra
Que no se pierdan las palabas que acarician,
que aman, las palabras que erizan de emoción, las
que abren caminos y almas,
las buenas palabras y las palabras buenas.
Que no se pierdan tus palabras guardadas en mi
corazón,
las que nacen en la intimidad del abrazo, las que
estimulan,
las palabras desnudas, las aparecidas de pronto,
las bien dichas,
las que imaginan vidas y mundos mejores.
Que no se pierdan las palabras que pueblan, que
arraciman,
que unen, que celebran, que curan.
Las que piden amor y las que lo dan,
las que gratifican,
las que gratifican,
las del primer amor, las del último amor
y las del amor de toda la Vida.
Que no se pierdan las palabras de quienes las
tienen prohibidas,
las amordazadas, las palabras valientes y justas,
que no se pierda la palabra dada.
Que no se pierda la palabra.
Marcelo, diciembre 2014
El lado artesanal de la Vida
Parece necesario arrancarle los clavos al Cristo y bajarlo de la muerte ejemplarizante. Hay que aceptar que el milagro de la vida deambule entre nosotros. Parece que hay que volver al Pez del cristianismo primitivo como símbolo de fe, de fecundidad y abundancia. Desde hace 2.000 años la mala nueva es que alguien murió por nuestra culpa. Ya conocemos demasiado de la muerte y de la culpa. Las noticias del mundo son partes médicos de un moribundo. Como si hubiese que abandonar toda esperanza, como si vivir tuviera una larga lista de contraindicaciones. La consigna es salvarse de la ansiedad nuestra de cada día consumiendo cada vez más. Nada debe oler a usado. Todo tiene que ser nuevo, sorprendente y fácil de usar. Tiene que ser rico y adictivo. Hemos perdido la capacidad de esperar pacientemente la ineludible construcción de las cuestiones importantes de la existencia y del valor del tiempo de aprendizaje, de preparación del viaje. Transitamos por la cultura de la hipervelocidad, sin tiempo para las escalas ni para mirar a los costados. Sin reparar en la periferia del mundo donde sobreviven las criaturas sin oportunidad, tribalizadas y discriminadas. Criaturas exiliadas de la prosperidad y la comodidad. Seres de otro mundo que viven en una subcultura cuyos códigos de convivencia parecen difíciles de comprender por quienes corren a ponerse a salvo. Así el mundo se divide cada vez más hasta no reconocernos, fomentando el aislamiento social, las sensaciones de injusticia y venganza, los estímulos para reclamar por medios deshonestos y violentos estar a salvo. Así se naturaliza la delincuencia, la violencia intrafamiliar, los padres y las madres que roban y que matan como modelos para niños que viven situaciones de estigmatización de su entorno social y que establecen vínculos con niños que viven situaciones familiares similares. Esto los deja en un profundo estado de vulnerabilidad en el cual terminan imitando los modelos de los adultos cercanos o calmando la intemperie emocional a través del consumo de drogas. Entonces, se activan los eventos cíclicos de niños que roban y matan y se convierten en “menores” y más tarde en “adultos con antecedentes penales”, a los que hay que combatir con más balas y grilletes. Son lo que pueden ser. Sin embargo, también subyace la violencia en entornos que parecen tener todo para ser felices. La hipocresía y el secretismo atraviesan todos los estratos sociales. La crisis de fe en acciones constructivas y positivas hace difícil establecer vínculos sanos y nutricios. Los referentes han sido eclipsados por una cultura superficial y banalizadora de toda mirada profunda y esclarecedora. La crisis social es más grande y compleja que la rotación de los partidos políticos en la administración de un gobierno. Es que la desintegración social es un negocio rentable para las empresas globales más poderosas que los países. Ellos imponen sus reglas al mundo y mantienen funcionando la rueca del dinero. Nuestra percepción del mundo la fabricamos con fragmentos de información de dudosa fiabilidad. Los informativos son desinformativos y deformativos. Hoy vivimos en la oscuridad absoluta y sin rumbo cierto, experimentamos el hondo desconcierto de la falta de certezas en un mundo peligroso y al acecho. Y aun, cuando eso puede causar la parálisis de la perplejidad es también cierto que la falta de referentes nos da la enorme posibilidad de innovar, de crear algo nuevo. Si admitimos esto podemos ver que no estamos en un mundo sin esperanzas. Es la oportunidad de hacer e involucrarse en hechos que cambien nuestra zona de influencia. Que hagan nuestro entorno mejor. Es necesario rescatar el valor artesanal de la vida. La construcción paciente de los vínculos, de la familia, de los objetos. Todo tiene un tiempo y un espacio. Un tiempo para ser aprendido. Disfrutar el proceso de crecer y de lograr nuestros objetivos a velocidades humanas. Debemos evitar el quererlo todo y quererlo ya. Debemos aprender a transitar por el fracaso con una mirada comprensiva e integradora. Está bien y es necesario equivocarse. Es la forma de aprender conscientemente. Quienes pretendan ahorrarse el camino terminarán caminando más ligero que sus pies y tropezarán más veces de las necesarias antes de saber levantarse. La Vida es fundamentalmente construcción paciente y artesanal de las habilidades. Los invito a dejar salir la creatividad y la pasión por un mundo más auténtico e imperfecto; y no artificial y perfecto, como recién comprado aprovechando los últimos descuentos del shopping de turno. ¡Feliz 2015 para todos!
Marcelo
martes, 7 de octubre de 2014
Frágil
En sus ojos habita toda
la luz del mundo
Solamente, cuando me miran,
vuelvo a nacer
Yo soy barro y cenizas,
sedimento intergaláctico,
Milagro latente
La arenisca prehistórica sube
a la superficie enchumbada en petróleo
Incendiándose con tu presencia
Tú activas los prodigios en
mis costas solitarias
Nuestros dolores son el
punto de equilibrio, tan frágil
Que amenaza nuestra
existencia
Suscribirse a:
Entradas (Atom)